Por Rita Rodriguez.
El 12 de abril se celebra el Día del Gineco-Obstetra, por este motivo conversamos a la Dra. Mónica Gelsi – MP 1.484 (izquierda en fotografía), quien se desempeña como médica obstetra, ginecóloga, educadora en sexualidad y sexóloga; -además- es integrante activa de nuestra Asociación Grupo PANDiS.
Dentro del marco de esta celebración, nos pareció muy importante destacar la importancia del PAP (Papanicolaou) cuyo nombre corresponde al Doctor griego, quien descubrió la técnica para ayudar a prevenir y detectar tempranamente cualquier lesión que pueda llevar a un cáncer de cuello del útero; que -detectado a tiempo- puede diagnosticarse un tratamiento y hasta curarse.
El PAP sirve para mantener la salud y puede detectar lesiones precancerosas, se acompaña de la colposcopía (que es la observación del cuello del útero con aumento), lo que permite una mejor observación de cualquier lesión, y a veces debe ser estudiada con una biopsia.
Por otro lado, la especialista nos comenta que el estudio detecta heridas producidas por el PVH (Papiloma Virus Humano); patología responsable -en la mayoría de los casos- de estas lesiones y se contagia a través de las relaciones sexuales sin protección.
La Dra. Gelsi resalta que toda mujer que tenga relaciones sexuales, debe realizarse el estudio una vez al año. Si tiene pareja estable y es un vínculo honesto, el resultado es normal (Clase L), puede repetirse cada 2 o 3 años. Por otro lado, no es necesario que se hagan este estudio, aquellas personas que aún no se iniciaron en las relaciones sexuales.
Para finalizar destaca el hecho de que las chicas que nacieron a partir del año 2000 (a la fecha) han recibido la vacunación del PVH, dosis que fue incorporada al calendario de vacunación y se está brindando -por lo general- en las escuelas. De todas maneras, aconseja el uso del preservativo como una importante forma de prevenir la transmisión de enfermedades, tales como la hepatitis B, sífilis, gonorrea, VIH, entre otras.